NUEVA YORK- Un día de celebración también se convirtió en un día de recordación para residentes de Nueva York que festejan el Halloween y a la vez honran a las víctimas del ataque terrorista contra decenas de peatones en el bajo Manhattan.
Fue hace un año que un conductor en una camioneta alquilada arrolló salvajemente a peatones y ciclistas en un ajetreado sendero para bicicletas a lo largo del río Hudson, matando a ocho personas e hiriendo gravemente a otras once.
El comisionado de policía James O'Neill dijo que la policía quiere asegurarse de que los neoyorquinos puedan celebrar "en un ambiente de comunidad, paz y diversión, y ciertamente no de miedo".
Por los peligros acrecentados en este día, miles de oficiales uniformados y vestidos de civil estarán presentes para el gran desfile de Halloween de la ciudad en Greenwich Village, normalmente un evento lleno de gente, jubiloso, en el que tanto manifestantes como espectadores se presentan disfrazados.
A ellos se les unirá el contraterrorismo y las unidades de control de multitudes, los observadores de los tejados, los perros policías y los helicópteros.
Entre los muertos había cinco amigos argentinos que estaban de vacaciones en Nueva York, un turista belga, un hombre de Nueva Jersey que trabajaba en el World Trade Center y un ingeniero de software de Nueva York.
El conductor de la camioneta, Sayfullo Saipov, recibió un disparo de la policía después de estrellarse contra un autobús escolar y está a la espera de un juicio por cargos de terrorismo. Los fiscales buscan la pena de muerte.
